lunes, 27 de febrero de 2012

Oscar's 2012

Bueno, pues nada, lo esperado, las momias caducas y operadisimas de la muerte de todo menos de su caspa han voptado (mezcla entre votar y potar), y una vez más durante una ceremonia tan casposa como previsible se han repartido las estatuillas del maromo dorado como se esperaba...
Los premios gordos a la "innovadora" tochana en blanco y negro de The Artist ( ya me dirán que direncia hay entre esta y la infinidad de películas de ese tipo que se hacían cuando no había más recurso técnico, vamos que para ese atajo de momios el cine se podría haber quedado ahí sin más, claro que hay que tener en cuenta que el 80% de los votantes de la academía pasan de los 60 añazos... El resto más de lo mismo, director al mismo de la peli, actor el de la peli (George es demasiado guapo para premiarle...), el premio al afroamericano de turno se lo han dado a una tal no se qué por no se que papelón, los premios técnicos para quien más dinero ha gastado en efectos, etc... Pues eso, que no merece más crítica que la habida, nada nuevo bajo el sol y ¡viva la academia de la caspa! Por cierto, me niego a hacer la más mínima crítica de la película ganadora, ya se encargarán los medios y las progres desgraciadas que van de intelectualas de ir a verla y de decir que se han meado en las bragas de gusto por ver casi dos horas de cine mudo en blanco y negro...
Una vez más, sólo me queda una pregunta tras la entrega de premios ¿Oscar sería un consolador aceptable para dar gusto a un ojete hambriento?

sábado, 25 de febrero de 2012

La invención de Hugo (2012)

¡Brutal homenaje de Scorsese al nacimiento del cine! Un viaje emocionante y alucinante del que por desgracia hay que volver al acabar la película ¡me habría quedado allí toda la vida!
En esencia va de Hugo (Asa Butterfield), un niño prácticamente huérfano, vive en las entrañas de una estación de trenes de París y trata de arreglar un autómata, único recuerdo que conserva de su padre (el exbuenorro Jude Law). Para mi es la favorita principal de cara a los premios Oscar de este año, con once nominaciones de las que al menos dos o trtes son seguras victorias. En mi butaca, gozada y disfrutada, me he rendido ante la que puede que sea mi mayor orgasmo cinematográfico en sala de hace años (no penseis mal, no me he liado con nadie en la sala). Ha costado 170 millones de dólares de presupuesto y cada céntimo está amortizado.
La película es, sencillamente, un homenaje a los orígenes del cine y su función generadora de sueños. Su maravilloso sentido visual nos lleva al delirio a todos los que amamos este arte. Es una delicia para cinéfilos empedernidos, para neófitos virginales, para pequeños y mayores, para rudos seguidores de Stallone, casposos seguidores de Torrente, para todos.
Perfecta en imagen y con una banda sonora casi constante y perfecta  regala dos horas de magia en estado puro junto entre otros a Ben Kingsley , Christopher Lee o Sacha Baron Cohen. Y además en un estupendo 3D, herramienta ya prácticamente desvirtuada por su abuso comercial pero que en realidad nació con la intención de garantizar que la fantasía nos envolviera completamente, como pasa en esta película. Tremenda. Un regalo increible.
Nota: 10 sobre 10

martes, 21 de febrero de 2012

Young Adult (2012)


Para empezar deciros que quien espere una comedieta americana de bragas rosas, que se olvide. Esto es una comedia difícil de digerir porque destila acidez y amargura en la que muchos se pueden ver representados.
Mavis Gary (Charlize Theron) es la autora de los textos de una serie de novelas juveniles de éxito decreciente, vamos casi como la petarda que escribía Harry Potter pero en fracasada. Desencantada con su vida, regresa a la pequeña localidad en la que creció para intentar recuperar el amor de su adolescencia, Buddy (Patrick Wilson), ahora felizmente casado. Jason Reitman, el director, sigue diseccionando la sociedad americana como hizo en “Up in the air” abordando las dificultades de la maduración personal. Atentos, porque es difícil de engullir y digerir, pero vale la pena.
Falsa comedia sobre la imposibilidad de ser feliz antes de que el tiempo se nos eche encima, con un malévolo guión que busca urgarnos en las entrañas es una fábula de fachadas, de mentiras, de desequilibrios emocionales agudos y de distorsiones de una realidad que cada cual adecúa a sí mismo en función de su situación personal ¿os suena a alguien?. La apuesta es compleja y los objetivos difíciles. Claro que ahí, en ese coraje, en esa acidez, en esa brutalidad despechada, residen los méritos de esta amarga tragicomedia, tan ruda, triste y divertida como la vida misma.
Puede resultar complicado abandonarse al ritmo de la historia, que aboga falsamente porque cualquier tiempo pasado fue mejor, pero hay que rendirse a una estupenda Charlize Theron, cuya belleza se convierte aquí en arma de destrucción local en uno de los mejores trabajos de su carrera, además, atención a un inmenso Patton Oswalt que arma su penosa existencia diaria entre juguetes de acción articulados y bourbon artesanal. Quizá le falte rematar en sus conclusiones finales, pero “Young adult” toca, turba, revuelve e incomoda deliciosamente las conciencias de cada uno. Y eso está muy bien en una sociedad en la que cada vez escasea más eso mirar hacia dentro de uno mismo. El director de "Up in the Air" y la escritora de "Juno" no pueden equivocarse cuando se juntan...
Nota: 7 sobre 10

sábado, 18 de febrero de 2012

Shame (2012)

 
Michael Fassbender y su GIGANTESCO talento, su ENORME capacidad, capaz de demostrar que tiene algo SOBRENATURAL, nos pone perracos en Shame. Su enorme pollón es el indiscutible protagonista de la cinta. Lo deja claro en todo momento como en ese momento en el que le vemos mear con la puntita por debajo del culo, si como decía Clooney tiene un talento desorbitado que le permite jugar al golf sin necesidad de utilizar el palo.
Dejando de lado las inevitables bromas sobre el gigantesco pollón del prota, Shame es mucho más que eso. Shame es el segundo largo de Steve McQueen un londinense, negro y regordete que poco tiene que ver con el mítico protagonista de La Gran Evasión, ya su primera película fue toda un derroche de talento, la aquí inédita Hunger también protagonizada por Fassbender.
 
En Shame el sexo se convierte en un arma adictiva, capaz de destruir a una persona, Fassbender es un hombre adicto al sexo con desconocidas, necesita sexo y porno a todas horas (¿os suena? XD), pero es incapaz de mantener una relación sexual con alguien que conozca. Con la llegada de su hermana, Sullivan tratará de encontrar la forma de salir de esa adicción al sexo e incluso intentará encontrar la forma de encontrar la forma de mantener una relación formal. Todo esto le lleva a un fracaso que le sume en una ola de autodestrucción de la que le será complicado escapar.
Es posiblemente la parte final de la película, cuando llega esa autodestrucción a la que hacemos referencia la más visceral y radical de la película, dónde en forma de un acertado flashback empezamos a descubrir a un Sullivan ansioso, perdido, con una imperiosa necesidad de borrarse completamente del mapa. Al igual que ocurría con su primera película, McQueen narra todo a base de planos largos, eternos, también los primerísimos planos, todo lo que sirva para alimentar una sensación de cercanía y realidad, todo en Shame está milimétricamente estudiado, la pasionalidad que se erradica en la escena de la cena, la belleza que destila Carey Mulligan al cantar una versión de New York, New York en un primerísimo plano que magnetiza al espectador, el fantástico travelling de la huida de Sullivan, acabado, no casualmente ante la imagen de un semáforo destrozado que deja la silueta del paseante boca abajo. Pero lo mejor de todo es la interesante bajada de un personaje hasta lo más hondo del infierno, un viaje que le lleva hasta sentir pavor de su propio ser.
Shame no es una película apta para todo el público, lejos de hacer del erotismo el germen de la misma, se convierte en algo terrible, horroroso, las escenas de sexo son horribles, terroríficamente atroces, plaro que eso a alguna pasivorra sumisorra le encantará y le hará babear y lubricar como una perra en celo en su butaca. La interpretación de este personaje derrotado por parte de Fassbender es de una exigencia física y emocional desgarradora, llevando en sus carnes todo el horror de este personaje que viaja por completo hacia el infierno. Estamos ante la confirmación de un talento en ciernes, de un hombre que de seguir así se convertirá en uno de los mayores referentes del cine europeo, esta vergüenza nos sobrecoge, nos atrapa y nos destroza por completo. Y no lividemos el protagonista fálico de ENORME capacidad de interpenetración, perdón, interpretación...
Nota: 8 sobre 10

viernes, 10 de febrero de 2012

Chronicle (2012)

Imprescindible bombazo para esta temporada, la he visto en versión original en Londres y casi me meo en las bragas, brutal, perfecta, para pensar, superpoderes cotidianos sin salirse de madre y con bajo presupuesto que ni se nota ¡os guste el tipo de cine que os guste no os la perdais en cuanto la estrenen en España dentro de un mes! Avisados estais, no dejeis que nadie os la cuente...
Tres chicos que "obtienen" superpoderes y se lo toman como si fuese un juego de niños, pero la cosa se complica cuando lo cotidiano de cada uno se impone a la responsabilidad que conllevan esos poderes adquiridos... Y hasta aquí os puedo contar, no os defraudará y pronto oireis hablar mucho de esta película, adelantaos y ser los primeros en descubrirla en cuanto llegue a España...
Nota: 9 sobre 10

jueves, 9 de febrero de 2012

Bienvenidos al Norte (2008)

Un ejemplo de la lucha entre tradición y renovación, entre lo popular y lo moderno, joya del cine francés, que ha sido y sigue siendo la obra más taquillera de la historia del cine gabacho. No apta para cinéfilas finolis que vayan de progres esperando un tostón neoclásico con actores insulsos y actrices femmefatales. Es una joya del humor sano a borbotones, que ha tenido su secuela en versión italiana "Bienvenidos al Sur" (que es una copia calcada, zafia e insufrible).  Dany Boon, un ch’ti de nacimiento mudado a la civilizada París, define esta estupenda comedia, localista, humanista y de contagiosa alegría de vivir, como un artístico film popular. Jacques Tati sobrevuela en espíritu este choque cultural (moral y filosófico) de dos funcionarios de correos, sus bicicletas, sus esposas o madres dominantes, sus aperitivos y su canto a la amistad y a la belleza de la vida.
En el norte galo, ese dulce pueblecito llamado Bergues, casi  digno de Berlanga, no solo reivindica a Tati, sino también al agrohumor tradicional, con diálogos delirantes y contagiosos. Si ese Norte gris y lluvioso es paraíso de la calma, de placidez y vifa calidad de vida, el Sur es la mujer histérica, las mentiras y la comedia más ridiculizante de la gente de ciudad. Comedias y proverbios que pasan de uno a otro a ritmo de vodevil que, claro, acabará con un festival de malentendidos, pantomimas y un optimismo conmovedor que te deja buen sabor de boca durante días y días.
!Genial!, !Auténtica!, !Admirable!, hacía mucho que no disfrutaba tanto con una película francesa. Esta película es la prueba de que con un presupuesto bajo puedes conseguir una "obra maestra". Actores poco conocidos (en lo que a cine se refiere), y un guión bien trabajado hacen de éste film una joya. Es la típica película que aparentemente no tiene nada, pero en su intención te deja una moralina con muy buen sabor de boca y que te tiene enganchado durante toda ella.
Nota: 9 sobre 10

martes, 7 de febrero de 2012

Jack y su gemela (2012)

Adam Sandler es un rey midas de las películas mierdosas e infumables. Es capaz de estrenar dos y tres al año, llevarse una buena taquilla estadounidense e incluso ìññar algo en la internacional, y punto. Con Jack y su gemela sucede tres cuartos de lo mismo. Película horrorosa y zafia, comedia que cae más abajo que otras bazofias como Zohan y que demuestra su incapacidad para hacer algo nuevo. Y por si fuera poco, añade a nuestro Torrente para dar más "caché" a semejante montón de mierda en celuloide. Eso si, la caspa patria sólo sale aquí, al resto del mundo le evitan ver las chichas blanquecinas del Segura ¡alabado sea Dios! ¡qué no piensen los guiris que si vienen a España en vez de chulazos morenos se van a encontrar con sebosos casposos que van de graciosillos amiguetes!
¿Qué nos ofrece en esta película Adam Sandler? Sencillo, él por partida doble. ¡Como si no fuese bastante con un plasta, toma dos! Desde ahí podemos imaginarnos el argumento. Últimamente sandler decide aderezar su basura con algunos rostros conocidos en Hollywood. Ahora hace con Katie Holmes (la comedora de placentas del pequeño Tom Cruise, alias pasaporte hetero del susodicho) o Al Pacino (aún con su innegable pedigrí, a pesar de que va en caida libre hacia el olvido). Sin olvidarnos de Torrente, perdón, de Santiago Segura. Papeles absolutamente prescindibles y que están puestos a pegote con el único afán de sacar brillo a los títulos de crédito. Algo así como vestir de joven a una vieja locaza para que vaya a ligar a un bosque y hasta que no le tengan a dos metros no ver sus pliegues pellejosos y pensar que era un efebo paquetón, con lo que se consigue el mismo resultado que en la peli, la desilusión de quien se había hecho a la idea de tener un orgasmo y se queda con una arcada.
Si Adam Sandler se embolsa cientos demillones de dólares por cada basura que estrena ¿por qué va a parar de hacerlas? Eso es lo que pensará cuando se pone delante de un guión o cuando lo redacta en una servilleta de papel de algún club de Hollywood.
Jack y su gemela es una película prescindible. Una comedia petarda cuyos "mejores momentos" pueden disfrutarse (o padecerse) en los tráilers promocionales, y poco más.
Nota: 4 sobre 10

domingo, 5 de febrero de 2012

Moneyball: Rompiendo las reglas (2012)

“Moneyball: Rompiendo las reglas” es la adaptación de un libro escrito por Michael Lewis en 2003, que cuenta la historia real de Billy Beane, un ex jugador de beisbol que ejerce de gerente en los Oaklands Athletics y tiene que ver cómo cada temporada los clubs con más presupuesto fichan a sus mejores jugadores. Con un equipo en constante recomposición, Beane no consigue el dinero que le hace falta para poder aspirar al fichaje de los jugadores que necesita para plantar cara a los equipos poderosos. Hasta que conoce a Peter Brand, un joven economista fanático del beisbol como él, que ha creado un curioso método matemático y estadístico para elegir a los jugadores que más convienen a una plantilla en concreto sin que ello suponga que se trate de los más cotizados, que valora entre otras cosas si la novia del jugador es fea...
La relación entre ambos personajes — muy bien interpretados por Brad Pitt y Johan Hill — es, sin duda, lo que en países en los que pasamos del beisbol como de comer mierda, llamará más la atención. Se trata de dos hombres opuestos en todo, capaces de encajar a la perfección gracias a la intensidad con la que viven ese deporte. A partir de ahí, ambos encuentran la valentía de oponerse al sistema que, por supuesto, se burla de un método que sólo se basa en cifras y porcentajes. Ni siquiera el propio entrenador del equipo, interpretado por el siempre creíble Philip Seymour Hoffman, cree en el proyecto hasta que no le queda más remedio que utilizar a esos jugadores “desechados”, y es entonces cuando empieza a ganar sorprendiendo a todo el país y cambiando para siempre las reglas del deporte más genuinamente norteamericano.
Al final resulta ser otra historia de superación a lo yanki, con moralina a raudales en torno a ese deporte que aquí tan poco interesa... el filme dirigido por Bennett Miller cuenta con los elementos que han de caracterizar a una cinta de calidad y no sólo por la impecable interpretación de la curiosa pareja protagonista, también por un guión inteligente y bien adaptado a la gran pantalla así como por una cámara que se mueve con destreza remarcando las escenas de mayor intensidad del filme, aquellas, por supuesto, que tienen lugar en un estadio lleno de gente para apoyar a su equipo en los momentos cruciales de la temporada. O para sufrir con él cuando, al final, lo que llega es la previsible derrota a pesar de tanto trabajo y sacrificio. No creemos en su éxito en los Oscar, ni tan siquiera al "cantado" por algunos para Pitt.
Nota: 7 sobre 10