Una noche bajo manta con amigos con esta película me ha provocado la necesidad urgente de recomendarla aquí tras casi 20 de haberla visto por primera vez.
Un puñado de amiguetes, escaso presupuesto y mucho sirope es lo que necesitó Peter Jackson para debutar con el preludio de lo que sería la fantástica "Tu madre se ha comido a mi perro". Gore cutre en estado puro en los inicios de uno de los directores que después han sido referencia en el cine mundial. Menudo camino recorrido desde esta película hasta el universo de Tolkien y sus anillos...
Su punto de partida, que se descubre a medida que avanza la película, ya resulta del todo delirante, pero además, está llena de momentos de desenfrenada hilaridad mezclada con vísceras y casquería a granel de principio a fin. Vamos un disfrute apra los amantes del gore y el humor cutre esperpéntico, una obra única hasta que realizaron "Tu madre se ha comido a mi perro". El prolegómeno con que la dota Jackson, además, con tan sólo dos secuencias desarrolladas y dos personajes presentados, logra ser tremendamente eficaz, por lo rápido que engancha al espectador, por las esperpénticas situaciones y personajes y, en especial, por el festival gore al que ya asistimos desde buen comienzo, advirtiendo a cualquiera que no sea amigo de la hemoglobina a raudales que éste no es su rincón. Sin duda un apelícula de culto arrinconada y que es ideal para pasar un rato divertido bajo una manta y muchas palomitas, eso si, blancas, sin colores por si algún estómago llega a asimilar ideas y acaba siendo protagonista de una de las escenas más gore de la película.
Nota: 7 sobre 10
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